Casa Mingo fue inaugurada por Domingo García González en 1888 , en lo que fue un antiguo almacén de material del ferrocarril, cuando se iniciaban las infraestructuras ferroviarias en Madrid. No hay que olvidar que fueron muchos los asturianos que trabajaron en la antigua Estación del Norte, la Estación del Príncipe Pío. Este lugar se convirtió, en centro de reunión a comienzos del siglo XX de muchos asturianos que emigraron a Madrid. Como a muchos otros, la nostalgia les abrasaba y encontraban consuelo bebiendo sidra y departiendo con gentes procedentes de su misma región de origen.
Dicen que es la sidrería más antigua de Madrid y de España, en cualquier caso, en su interior, el tiempo parece haberse detenido.
Su decoración mantiene muchos de sus motivos originales, abundancia de madera, botellas vistas y barricas, suelos de baldosas. Ese ambiente tan singular ha permitido que Casa mingo aparezca en películas y anuncios, un ejemplo es la película “Los tramposos”, con Tony Leblanc y Antonio Ozores. Dirigida por Pedro Lazaga , en 1959 y en la que se narra la historia de dos pícaros modernos del siglo XX en Madrid, como puedes ver, no hemos cambiado tanto.
En cuanto a la bebida, esta claro, sidra, en la comida el protagonista absoluto es el pollo asado, también las croquetas, los chorizos a la sidra, la fabada… Y entre sus postres, yo me quedo, con el arroz con leche.
Justo al lado nos encontramos con el recuerdo del pintor Francisco de Goya, frente al restaurante una escultura conmemorativa. Al lado, sus frescos en las ermitas de San Antonio de la Florida, diseñadas por Ventura Rodríguez, el Parque de la Bombilla y el Puente de la Reina Victoria.
Un lugar conocido y concurrido y que sigue llamando la atención al que llega por primera vez.
Un abrazo.
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