Puentes de Madrid en BicicletaEn el extremo norte del Madrid Río nos encontramos el Puente de la Reina Victoria. Se inauguró el 13 de Junio de 1909 coincidiendo con la festividad de San Antonio de Padua. La inauguración fue presidida por los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia, en  honor a la reina recibió el nombre de Puente de la Reina Victoria.

Reemplazo un puente anterior conocido como Puente Verde de la Florida, por el color de su barandilla. Un puente peatonal con tablero de madera obra de Pedro de Ribera que comenzó a construirse en 1728. Convivieron algún tiempo pero el puente de Pedro Ribera estaba muy deteriorado desde una terrible riada en 1906.

El puente une las calles de Aniceto Marinas con la Ribera del Manzanares, conectando el parque de la Bombilla, la ermita de San Antonio de la Florida y su gemela, con las Colonias de San Antonio de La Florida y  Manzanares que se encuentra al otro lado del río. Se le  llama también Puente Victoria.

Lo construyó el ingeniero José Eugenio Ribera Dutaste, sobre un proyecto del arquitecto Julio Martínez-Zapata Rodríguez. El puente, de decoración modernista como corresponde a su época de construcción está compuesto por dos bóvedas elípticas y paralelas de hormigón armado. Se trata de uno de los primeros puentes de hormigón construidos en España. Esta decorado con cuatro jarrones y ocho farolas de fundición de hierro con osos rampantes de Francisco Iglesias.

Durante la II República española cambió el nombre por el de Puente de Galicia, está zona sufrió mucho los efectos de la Guerra Civil en Madrid. Después de la guerra recuperó su nombre original.

El puente está sufriendo una moda que se extiende por todo el mundo: los candados del amor.  Este fenómeno que está amenazando la integridad de muchos puentes, alguno de ellos de enorme valor patrimonial, surgió a partir del libro del italiano Federico Moccia “Tengo ganas de ti” (Ho voglia di te), y de la película del mismo título que se llevó al cine en 2006. En la historia sus protagonistas enganchan un candado a una de las farolas del puente Milvio de Roma, como símbolo del amor eterno.  Los novios cierran un candado en la barandilla con una frase de amor y sus nombres y después, tiran la llave al río. Una forma de declarar que su amor será eterno. Esperemos que la moda no sea eterna y nuestros puentes dejen de sufrir esta situación.

Un abrazo.

Puentes de Madrid en BicicletaPuentes de Madrid en BicicletaPuentes de Madrid en BicicletaPuentes de Madrid en BicicletaPuentes de Madrid en BicicletaPuentes de Madrid en BicicletaPuentes de Madrid en BicicletaPuentes de Madrid en BicicletaPuentes de Madrid en BicicletaPuentes de Madrid en BicicletaPuentes de Madrid en Bicicleta