Museo del Traje (10)En la pasada Semana de la Arquitectura pudimos disfrutar de una visita del Museo del Traje. Nuestro guía fue un auténtico lujo, Juan Carlos Rico, el conservador del Museo del Traje y además Doctor en arquitectura. Como él mismo nos contó, vió como se levantaba el edificio y trabaja en él, por lo que lo conoce perfectamente.

La visita se planteó como una visita del edificio, no de las colecciones. Es obra de Jaime López de Asiaín y Ángel Díaz Domínguez, que hicieron el proyecto en el año 1969. Las obras se prolongaron desde el año 1973 al 1975. Hubo algunas intervenciones, algunas paralelas como la Sala Julio González, a cargo de Antonio Fernández Alba y una ampliación en el año 1980 de Francisco Valero de la Parra.

El edificio es en buena parte fruto del Congreso de Arquitectura de Museos, celebrado en México en el año 1968. Allí se habló de los edificios de museos y como debían ser concebidos para dotarles de un carácter eminentemente didáctico, aportarles flexibilidad museográfica y diseñar opciones para que esos espacios expositivos crezcan.

Se buscaba la máxima libertad en la utilización del espacio y se optó por una retícula con pilares. Se creó un contenedor, una composición que integraba elementos verticales y horizontales y conecta el interior y exterior, con el estupendo jardín del Museo del Traje del que hablaremos el próximo sábado (y que genera no pocos problemas de conservación).
El edificio es básicamente una U entorno a un patio central, con una planta baja abierta, a la manera de una gran plaza porticada entre pilares. Sobre los pilares, el contenedor, que pretendía adaptarse a las necesidades dinámicas de un museo definido como centro cultural.

La torre central albergaría departamentos de investigación, talleres, zonas administrativas, etc. Una oposición entre espacio vertical y el horizontal del área de exposiciones.

Ganó el Premio Nacional de Arquitectura en el año 1969 pero la polémica le ha perseguido siempre. Inicialmente fue la sede del Museo Español de Arte Contemporáneo, cuyos fondos fueron al Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. En el año 1987 llegan los fondos del Museo del Pueblo Español, un proyecto cultural nacido en la II República y que pretendía conservar la memoria histórica de “las obras, actividades y datos del saber, del sentir y el actuar de la masa anónima popular”. En el año 1993 el Museo del Pueblo Español y el Museo Nacional de Etnología se unieron en el Museo Nacional de Antropología aunque siguieron funcionando de forma independiente.

En el año 2004 se crea el actual Museo del Traje, como Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Alberga numerosos objetos de la vida cotidiana del pasado, organizados en diversas colecciones de vestuario, joyería y accesorios, textiles, actividades económicas, equipamiento doméstico, actividades lúdicas o religiosidad y creencias.

Una visita entretenida y muy interesante que vale mucho la pena.

Un abrazo