La Estufa Fría del Parque Juan Carlos I fue construida en el año 1996. Cuenta con una superficie de 4000 metros cuadrados, una altura de 12 metros, y está construida con hormigón y cristal. Dividida en doce espacios, en ella podemos encontrar una gran variedad de especies vegetales: cítricos, helechos, trepadoras, bambúes, y un muchas más. Espacios híbridos que se mezclan y otros, como el Jardín Japonés, que tiene un lugar mucho más destacado.
¿Pero qué es una estufa fría? Es una estructura semicerrada, que aprovecha sistemas de calefacción pasivos para crear en su interior un microclima. Gracias a la bioconstruccion y la aplicación de la sostenibilidad en la arquitectura, aprovechando la orientación del edificio, los paneles de cristal, y en este caso, con un ligero soterramiento, se consigue una climatización natural sin necesidad de consumir energía.
Básicamente es un invernadero moderno y más sostenible. Para evitar el ardiente sol del verano madrileño, la Estufa cuenta con unos enormes parasoles que, además de conservar el calor propio y su humedad, se cubren con lamas de hormigón cuya inclinación corta el sol vertical del verano mientras deja pasar el sol invernal, conque incide con unos rayos más oblicuos.
En el año 2008 se crea una colección botánica de plantas exóticas (220 especies) creando así una nueva senda botánica didáctica en el parque Juan Carlos I.
Fue obra de los arquitectos José L. Esteban Penelas y Emilio Esteras Martín. Un recinto muy interesante, en el centro del parque, donde en muchas ocasiones no nos encontramos a nadie y que estoy seguro que mucho madrileños no conocen. Si es tu caso, ahora es muy buen momento para acercarte.
Un abrazo.
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