La ruta recorre una de las ciclo vías más populares de la República Checa, sigue la red popular de cicloturismo Eurovelo, y termina por los caminos del Danubio. En este viaje de 12 días a tu aire por un recorrido fácil sin dificultades ni técnicas ni físicas, no hay que hacer nada más que disfrutar. Con etapas diarias de 45 a 77km, está pensado para el ciclista habitual.
ITINERARIO
Llegarás a Praga por tu cuenta, y si puedes te recomendamos reservar algunas noches extras para poder recorrer la ciudad con calma. Destacan los monumentos como la Plaza de La Ciudad con su reloj astronómico y el Puente de Carlos sobre el río Moldava, que sin duda merecen una visita.
Empezando por las orillas del río Moldava y atravesando una zona de montaña suave llegarás al famoso castillo Konopiste, residencia de verano del Archiduque Franz Ferdinand cuyo asesinato desencadenó la Primera Guerra Mundial. Desde ahí seguirás en tren a hasta Tabor.
Sobre dos ruedas entrarás en la región de Bohemia del Sur, con sus paisajes suaves y verdes. No te pierdas la ciudad de Telc, con su preciosa Plaza Mayor, clasificada como Patrimonio Mundial por la UNESCO.
Otro lugar imprescindible para visitar en esta ruta es la ciudad de cuento Mikulov con su majestuoso castillo cuyos orígenes se remontan en tiempos medievales, cuando las caravanas viajando por la ruta del Ámbar buscaban el refugio de sus murallas.
Siguiendo por lo que una vez era ‘La Cortina de Hierro’ cruzarás la frontera con Austria. Una vez en la ciudad de Mistelbach, habrá un traslado en vehículo hasta Viena, la ciudad imperial del Danubio. Un lugar excelente para quedarte también alguna noche extra, para poder visitarlo con calma antes de subirte a la bici de nuevo.
¿Alguna vez has visitado dos capitales en el mismo día, llegando en bicicleta? Ahora es tu oportunidad. Desde Viena siguiendo el Danubio, llegarás en bici hasta Bratislava. El último tramo es de una naturaleza verdaderamente espectacular. Hay opción de elegir una variación a la ruta más exigente si lo deseas.
El destino final de este viaje es Budapest, ciudad imperial de gran belleza, que se creó en el siglo XVIII unificando las ciudades de Buda y Pest. Descubre el lado llano de Pest, a la orilla este del Danubio, y respira el ambiente literario del siglo XIX. O date una vuelta por la zona montañosa de Buda y sube la colina Gellert para tener unas vistas preciosas.
Recuérdate que Budapest fue declarado ‘Ciudad Balneario’. ¡No te vayas a casa sin haberte dado un baño relajante y bien merecido en uno de sus baños termales!
